el rocanrol de los idiotas

Yo no tenía ganas de reír, tu reías para no llorar;
yo le guiñaba un ojo a mi nariz, tu consolabas a tu soledad.
Yo sin ninguna escoba que vender, tu con mil y una noches que olvidar;
a mí no me quería una mujer, a ti se te moría una ciudad.
Tu habías perdido el último autobús, a mí me habían echado de otro bar;
los mismos alfileres de vudú, el mismo cuento que termina mal.

Pero quiso el cielo bautizar el suelo con su gota a gota
y con champú de arena para tu melena de muñeca rota
y tu mirada azul me dijo a cara o cruz
y mi alma de tahúr lo puso a doble o nada.
Y los peces de colores de mis botas y tus marchitos zapatitos de tacón
locos por naufragar, salieron a bailar
al ritmo de la lluvia sobre las capotas, el rocanrol de los idiotas.

Yo no venía de ningún país, tu ibas camino de cualquier lugar;
conmigo no contaba el porvenir, de ti no se acordaba el verbo “amar”.
Yo no jugaba para no perder, tu hacías trampas para no ganar;
yo no rezaba para no creer, tu no besabas para no soñar.

Y sin equívocos de vodevil, ni alertas rojas en el corazón
el dios de la tormenta quiso abrir la caja de los truenos y tronó,
porque quiso el cielo acariciar el suelo con su gota a gota
y con champú de arena para tu melena de muñeca rota.

Qué disparate de partida de ajedrez con una partenaire adicta al jaque mate.
Y tu bolso como un nido de gaviotas, y mi futuro con pan duro en el cajón
locos por naufragar, salieron a bailar
al ritmo de la lluvia sobre las capotas, el rocanrol de los idiotas.

Capeando el temporal, salieron a bailar,
como dos locos bajo el chaparrón de notas del rocanrol de los idiotas.
El rocanrol, el rocanrol de los idiotas.
Como tu y como yo. El rocanrol de los idiotas.
Se marcó la calle con aquel detalle de dejarnos solos...

viajar - asar - disfrutar

ruta, peajes, picada de chorizo y queso (caseros), fuegos, brasas, bifes y achuras, ensalada, coca, música, amigos, etc.

Decía el español: "Soy muy mal novio, un pésimo amante y peor marido. Pero un estupendo amigo."

no se puede dormir

Hay noches que el insomnio viene a desnudar, a los pies de la cama donde uno duerme (sin descansar), la conciencia del presente, para tirarme las cartas, y pedir a gritos que entre el suplente que está esperando en el banco, con aire fresco para dar vuelta el partido.
Porque de lo contrario, con los recuerdos tan pegoteados, dos o tres historias todavía en la mesa, el destino en pantuflas, y el futuro mordiéndome los tobillos... bueno de maduro se cae que así no se puede seguir, ni respirar, ni mucho menos dormir... no era el café, el culpable de la trasnoche.

el servidor NM. es quién suscribe.

Pan árabe con provolone, cebollas a la plancha y vinagreta de mostaza

Saltear las cebollas unos cuatro minutos, hasta que estén bien doradas, darlas vueltas dos minutos más para que queden tiernas.
Colocar sobre pan árabe, un buen pedazo de queso provolone, y la cebolla caramelizada. Llevar unos minutitos al horno hasta que se funda el queso. Agregar la vinagreta de mostaza y servir inmediatamente.

Vinagreta de mostaza: 1 cda. mostaza, 1 cda. vinagre de vino tinto, 1 cda. aceite de oliva, pimienta negra.

cuanta incertidumbre

"delicia de mis sueños, despierto y no quiero más, como pica esta pimienta de no saber si te quiero al lado mio, o si prefiero la distancia..."

el humilde servidor

los fuegos

"El fuego tiene su propio idioma, que se habla en el reino del calor, el hambre y el deseo. Habla de alquimia, de misterio, y por sobre todo, de posibilidades.
Es una voz somnolienta dentro de mí. La bestia omnipresente en mi alma.
Va más allá de las palabras y de la memoria, viene de un tiempo muy anterior a mis recuerdos."

Francis Mallmann


injusticia

"injusta melancolía, que sudamos día a día, yo no sé si tu sabías, que mi alma está vacía, solo queda la fantasía, de llenar ésta alcancía..."